Luego de que el poder electoral anunciara los resultados, Maduro apareció en cadena nacional celebrando su victoria. Impresionante resultó ver las caras de quienes tenía a su lado y al frente en el mitin: nadie lucía convencido. Tuve la oportunidad de realizar un recorrido en varios centros electorales de Caracas en la tarde del 20M y el silencio era lo que reinaba. Un silencio que, me recordaba un amigo, no es nuevo: es un país que desde hace un tiempo no celebra nada. Continuar leyendo…