Desde el jueves 31 de marzo, miles de personas se reúnen cada noche en la Place de la République en París, para compartir sus desilusiones con la política institucional y poner en práctica formas de democracia directa en asambleas populares, como lo hicieron los indignados y los movimientos occupy en 2011.
Para finales de febrero, todos los ingredientes parecían reunidos para que surgiera un “movimiento de indignados a la francesa”, similar a aquel que marcó la primavera de 2011 en la península ibérica y que continúa transformando España y Portugal. Con la iniciativa de la #NuitDebout (#NocheEnPie), un grupo informal de ciudadanos, alrededor de la revista Fakir y del economista Frédéric Lordon, ha abierto un espacio que ha permitido a los ciudadanos intercambiar, expresar su indignación, soñar juntos otro mundo y una “convergencia de luchas” que falta construir. Continuar leyendo…